Concejo: El oficialismo no cree en posible acuerdo

Desde el FPCyS se muestran escépticos. ¿Habrá fumata blanca en algún momento?.

Los fracasos en las sesiones preparatorias del Concejo de Sastre ya no son noticias. Ahora, y aunque sea una paradoja, el dato pasa por saber cuándo volverá a funcionar. Pero nada claro hay todavía. Y cuando todos ponen el ojo en la Justicia, desde el Frente Progresista se muestran desconfiados en un futuro consenso. “Hoy soy escéptico para algún arreglo. Pensé que en marzo podía haber solución, pero estamos en mayo, va a pasar junio y todo sigue igual”, le dijo Oscar Cagliero, concejal en funciones del FPCyS a bumerangnews.com.

Corrió mucha agua abajo del puente desde aquel mes de diciembre cuando se desató el escándalo. Ediles que aún no juraron, denuncias y acusaciones desde ambos bloques, concejales en funciones que no pueden trabajar desde el mismo recinto, y una lucha encarnecida por la banca de la presidencia, dejan al descubierto la guerra interna existente.

Parece que lejos está de salir humo blanco del Concejo. Porque a pesar de haber fracasado una nueva reunión, ni siquiera los ediles se pusieron de acuerdo en un encuentro íntimo. Una semana atrás, el cónclave juntó a los seis concejales, pero nadie dio el brazo a torcer. “Desde ambos lados seguimos firmes en las posiciones. Nadie se mueve de su postura y todo sigue igual. Por eso la reunión fracasó”, explicó Cagliero.

¿Moreno se queda sin banca?

La puja por la presidencia del Concejo puso frente a frente a Cagliero con Albino Moreno – edil electo por el Justicialismo –. Y lo que en su momento fue un tire y afloje para quedarse con ese cargo dentro del recinto, ahora parece haber tomado otro rumbo, por lo menos desde el lado del FPCyS. “Apreció una quiebra de Moreno y, de comprobarse, quedaría inhabilitado para asumir”, explicó el edil del bloque oficialista. Ahora, habrá que esperar para saber el rumbo de la causa.

Las inasistencias golpean el bolsillo

Otro de los datos que surgió en las últimas horas fue la multa que se aplicará a quienes no asistieron a las sesiones convocadas meses anteriores. El castigo asciende a $30.000 por mes. Pero este comenzaría a regir desde el mes de abril. De acuerdo a lo que detalló Cagliero, “se aplica a los concejales en funciones, o sea Reschia y Galliano”.
Así las cosas, y con el tiempo que no se detiene, la sala “Raúl Cragnolino” sigue con sus bancas descansando.